Balance energético:
Es la relación entre la energía que proporcionan los alimentos y bebidas que ingerimos y la energía que gasta nuestro cuerpo, si hay equilibrio se mantiene el peso.
Según la edad, el estilo de vida si somos sedentarios, si realizamos alguna actividad de que tipo/intensidad, ... necesitaremos ingerir más o menos calorías diarias.
Además de las calorías que necesitemos para realizar actividad fisica, el cuerpo necesita un mínimo de calorías para realizar funciones básicas para vivir como, respirar, hacer la digestión, bombear la sangre, ... (metabolismo basal).
Técnicas culinarias saludables:
Es importante a la hora de preparar la comida, hacerlo de la mejor forma posible, evitando abusar de frituras, en la, medida de lo posible evitar precocinados o fijarse bien en los ingredientes, ya que pueden tener exceso de sal y conservante ademas de grasas poco saludables.
Es recomendable cocinar al horno, salteados, cocinar al vapor, al freír cualquier alimento hacerlo con poco aceite o a la plancha, ...
No es necesario tener grandes conocimientos de cocina o elaboraciones complicadas. Es adquirir pautas a la hora de cocinar más beneficiosas para el cuerpo.
E introducir a nuestra alimentación diario frutas y verduras de temporada.
Equilibrio emocional y alimentacion:
Cada persona somo un mundo y reaccionamos de formas diferentes ante el estrés, tristeza, alegria, problemas sociales ...
A muchos de nosotros como nos sintamos a nivel emocional, nos afecta a la alimentación.
Es importante ser conscientes de ello, por ejemplo la ansiedad/estrés pueden afectar a ingerir más alimentos azucarados y bollería industrial, o hay a otras personas que se les quita el hambre, en la misma situación.
Por eso, es importante ser consientes de como nos sentimos, que nos está pasando/afectando, para intentar primero solucionar lo que nos pasa o hacer cambios que necesitemos, ...para no caer en una alimentación desequilibrada o descuidada.
Una alimentación desequilibrada además de tener repercusiones a nivel físico, también puede producir síntomas como apatía, cansancio, irritabilidad, nerviosismo, falta de concentración, ... Por falta de vitaminas y/o minerales.
Por ejemplo: Una alimentación escasa de frutas, verduras y cereales puede repercutirnos a nivel emocional, concentración y memoria, entre otros síntomas.
Actividad física diaria:
Es importante mantenernos activos. No hace falta realizar actividades físicas de gran intensidad, caminar durante al menos 30 min/diarios tiene beneficios como mejorar la circulación, ayudar a bajar los niveles de entrés, dormir mejor, mantener los niveles de colesterol, ...
Adquirir hábitos como utilizar las escaleras en vez del ascensor, en la medida de lo posible ir andando al trabajo, colegio, ...
Cuidar las posturas,por ejemplo, al estar sentados durante un largo periodo intentar tener una postura correcta y levantarnos regularmente para estirar las piernas, al levantar/mover pesos, hacerlo de manera correcta para no hacernos daño.
Comenzar el día tomando un desayuno equilibrado:
El desayuno es la primera comida del día tras muchas horas de ayuno, por lo que es muy importante no saltarlo, ya que nos proporcionara la energía para empezar el día.
Muchas personas no pueden comer recién se levantan, ya que necesitan esperar un tiempo si es tu caso, no pasa nada, tomate el desayuno cuando lo necesites, lo importante es que no te lo saltes y que sea un desayuno equilibrado.
Un buen desayuno debería incluir:
Hidratos de carbono: cereales(mejor integrales) como pan o galletas, cereales de desayuno (evitar los azucarados) copos de avena,...
Vitaminas: frutas y/o zumos naturales de frutas (mejor que sean hechos en casa por nosotros)
Proteínas: Como lácteos (una taza de leche o yogur) una tortilla francesa, lonchas de jamón york/pavo
Es recomendable incluir frutos secos o semillas como las de sésamo, Chía, polen,..
Es recomendable realizar de 4-5 comidas al día:
3 principales: desayuno, comida y cena y 2 "tentempiés" almuerzo y merienda.
Es recomendable ya que así distribuiremos las comidas en más tomas, para evitar picoteos a deshoras, llegar con demasiada hambre a las comidas principales y comer con ansia y peor (cuando llegas a la hora de la comida/cena con mucho hambre, en muchas ocasiones, caemos en el hábito de comer mucho con ansia y abusamos de comidas preparadas o frituras, ...)
Es mejor repartir las tomas, así mantenemos los picos de glucosa estables y no llegamos con ansiedad a comer y prepararemos las comidas con más calma.
Igual de importante, siempre que se pueda, es comer sentado, en un ambiente tranquilo, sin prisa, msaticando bien, y procurando que sean a la misma hora, más o menos, cada día.
Tener una rutina y pautas a la hora de comer y preparar la comida, nos ayuda a llevar con más facilidad una alimentación equilibrada y más saludable.
Beber al menos 1,5 o 2 litros de agua al día:
La cantidad de agua mínima recomendada al día para adultos es de 2 litros. (es una cantidad mínima recomendada, la cantidad varia según edad, sexo, tipo de alimentación,…)
El agua es esencial para la buena salud, pero las necesidades de cada persona son diferentes.
Es importante beber agua durante el día. Antes de tener sed, ya que la sensación de sed, es una alerta de falta de agua en nuestro cuerpo, sería importante adquirir unos hábitos y pautas de hidratación durante el día.
Consumir 3 o 5 veces a la semana aves y pescados.
Reducir la ingesta de carnes rojas o ricas en grasas.
Comer 1 o 2 veces por semana legumbres.
Controlar el consumo de alimentos fritos, rebozados o precocinados.
Evite tomar bebidas dulces (con azúcar, glucosa, sacarosa, fructosa, etc.).
Añadir cereales integrales
Tomar platos variados.
Comer sentado, despacio y masticando bien los alimentos.
No abuses de la sal ni de los productos salados.
Todos los días, come, frutas, verduras, hortalizas, cereales (pan, pasta, arroz) y aceite de oliva. Las frutas, verduras y hortalizas, son ricas en vitaminas, minerales y fibras. Se recomiendan 5 raciones al día, por ejemplo 3 piezas de fruta y dos raciones de verdura.